Capitolio es un viaje cinematográfico a través de las sombras de Caracas, Venezuela, durante la revolución. Siguiendo la tradición de Nueva York de William Klein y The Americans del fotógrafo de Magnum Robert Frank, Christopher Anderson crea un retrato emocional de una época y un lugar que está a punto de explotar. Más que un enfoque didáctico o periodístico, Anderson ofrece una visión poética de un lugar donde conviven lo violento y lo sensual.
 
La palabra Capitolio alude al edificio abovedado que alberga un gobierno. En este libro, la propia Caracas se convierte en un Capitolio metafórico. En lugar de muros, tenemos una arquitectura modernista podrida que ha sido construida con petrodólares. Parece sugerir una época de opulencia, pero a través de las grietas se abre una jungla que revela la descomposición que se produce en su interior. Las calles actúan como actores sustitutos de los pasillos de este edificio donde el drama humano y la intriga política se llevan al escenario.